Aiptasia mutabilis es una anémona solitaria y muy frecuente en aguas del atlántico noreste (desde las costas atlánticas francesas hasta las islas canarias) y en la totalidad del mar Mediterráneo. Habita generalmente en regiones rocosas y muy frecuentemente en cavidades o grietas, de donde tan solo seremos capaces de observar los tentáculos del ejemplar.
El cuerpo de Aiptasia mutabilis está formado por un tronco que puede llegar a medir unos 15-20 cm de longitud. En uno de los extremos, posee una superficie adherente a modo de ventosa, y que permite al ejemplar anclarse firmemente al sustrato rocoso del interior de la grieta que haya decidido habitar. En el extremo opuesto del ejemplar, encontraremos los tentáculos, los cuales no suelen superar los 5-6 cm de longitud. Estos son cilíndricos y rechonchos en la base y a medida que llegan al final del tentáculo se van estrechando hasta acabar en una esbelta punta. Los tentáculos se disponen, alrededor de la apertura bucal, en 6 círculos concéntricos, habiendo un total de 136 tentáculos. Los ejemplares de Aiptasia mutabilis suelen poseer una coloración traslucida, basada en el color pardo amarillento. Esto se debe a la presencia de algas simbióticas en el interior de su cuerpo. El disco oral suele estar marcado por patrones de lineas entre azuladas y verdosas situadas de una forma radial a la boca, mientra que los tentáculos suelen presentar manchas o bandas blanquecinas.
La alimentación de Aiptasia mutabilis consiste en la captura por medio de sus tentáculos, y gracias a las células urticantes presentes en ellos, de zooplacton, pequeños invertebrados e incluso pequeños peces.
Aiptasia mutabilis es una especie con sexos separados que se puede reproducir tanto sexual como asexualmente (generalmente la mas frecuente). La reproducción sexual consiste en la liberación por parte de ejemplares machos y hembras de sus gametos, para ser fecundados en la corriente de agua, tras lo cual se forma una larva que posteriormente sufre un proceso de metamorfosis por el cual se asienta en el fondo y genera un individuo adulto. La reproducción asexual, se realiza mediante la división de su tronco en dos. El trozo del tejido escindido, generará la superficie adherente y los tentáculos para formar un clon del ejemplar original.
En el apartado de curiosidades, destacar dos aspectos. Por una parte, Aiptasia mutabilis en caso de sentirse atacada tiene la capacidad de expulsar por su apertura bucal una serie de filamentos blancos, llamados aconctios, de naturaleza viscosa y altamente urticantes, con los que hacer desistir al atacante. El segundo dato a destacar es que con frecuencia se establecen relaciones simbióticas con gambas Periclimenes amethysteus, por lo que la observación detenida de los ejemplares de Periclimenes amethysteus puede resultarnos en una grata sorpresa.
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