Los Beloniformes, deben su nombre al termino griego ‘belone‘ que significa aguja y esto se debe a su peculiar morfología. Por lo general de cuerpo fino y alargado, en los cuales destaca principalmente la estructura de su boca. La mandíbula superior está fijada al cráneo y generalmente suele ser fina y alargada. Muchas de las especies que pertenecen a este orden de peces, poseen en sus bocas afilados dientes. Sus aletas se caracterizan por la ausencia de radios espinosos, y la posición tanto de las aletas anales, dorsal y ventrales es posterior en el cuerpo.
Los Beloniformes, entre los que encontramos a peces voladores, agujetas y peces agujas, son especies muy ágiles y muy rápidas en el agua, donde se desplazan cerca de la superficie. Este habito de estar en aguas muy superficiales, ha condicionado el cromatismo de las especies perteneciente a este orden, teniendo por lo general un patrón de color contrapuesto que les evita ser visto por sus posibles presas y depredadores. La parte dorsal tiende a ser de colores verdosos o azulados, y la parte ventral y los laterales de colores plateados.
Numerosas especies, las conocidas como peces voladores, poseen unas aletas pectorales muy desarrolladas que se sitúan en un plano corporal relativamente elevado, y que junto a su grandes velocidad que son capaces de alcanzar, les permite planear fuera del agua, llegando a alcanzar velocidades en el aire de entre 50 y 60 km/h, y pudiendo desplazarse entre 50 y hasta 400 metros gracias a su habilidad de planear en el aire a una distancia relativamente corta de la superficie del agua.
Su alimentación consiste principalmente en algas, plancton y pequeños peces. Se conocen algo más de 280 especies de Beloniformes, las cuales se agrupan en dos subórdenes (Adrianichthyoidei y Exocoetoidei), 6 familias (Adrianichthyidae, Exocoetidae, Hemiramphidae, Zenarchopteridae, Belonidae, Scomberesocidae), y 34 géneros. Como orden de especies, los Beloniformes no han sido extensamente estudiados genéticamente, por lo que es de esperar cambios en su clasificación. Pese a que la gran mayoría de especies son marinas, se han descrito aproximadamente unas 90 especies que viven en aguas dulces o salobres.