La Muraena helena, o morena del mediterráneo es una especie de marcado carácter nocturno, aunque durante el día las podremos encontrar en hendiduras y oquedades rocosas en las que se guarecen. Disponen de un cuerpo alargado (1,5 metros de longitud), anguiliforme y muy robusto, aplanado lateralmente hacia la parte posterior, el cual carece de escamas. En contrapartida a la ausencia de escamas, Muraena helena tiene una piel viscosa debido a una secreción mucosa que las protege de cualquier lesión de su cuerpo. Posee unas hendiduras branquiales de reducido tamaño y forma redondeada, así como dos orificios olfatorios tubulares posteriores situados en las proximidades del borde anterosuperior de los ojos. Las morenas del mediterráneo, y en general las especies del genero Muraena poseen una vista algo limitada. Sin embargo, suplen su limitada visión con un sentido del olfato extremadamente desarrollado que utilizan junto con su linea lateral para detectar, (principalmente de noche) y posteriormente capturar a sus presas.
La Muraena helena es una especie desprovista de aletas pectorales y pélvicas. Sus aletas dorsal y anal son confluentes con la caudal y son utilizadas junto con un movimiento serpenteante del cuerpo para nadar y moverse por el fondo rocoso.
Llama mucho la atención, la desarrollada dentición, con fuertes y grandes dientes cónicos ligeramente inclinados hacia atrás. Pese a que el buceador tan solo es capaz de observar la dentición mandibular, existe una segunda mandíbula interior, la cual es protráctil y utiliza para introducir a la presa en el interior del animal. La cabeza de esta especie es esbelta, con los ojos de pequeño tamaño y una apertura bucal que sobrepasa la vertical formada por los ojos.
La coloración del cuerpo puede ser muy variable, por lo general los ejemplares jóvenes suelen tener tonalidades azuladas, mientras que los ejemplares adultos tienen una coloración parda, amarillenta, con un marbeado a base de manchas oscuras y claras, con el borde de las aletas claro.
Es una especie territorial, que se alimenta de peces, gasterópodos, cefalópodos y crustáceos. La Muraena helena tiene una reproducción ovípara, la cual es muy poco conocida. En ocasiones es posible encontrarlas en relación simbiótica con gambas de la limpieza Lysmata seticaudata.
Fotos: