Anisotremus virginicus

Anisotremus virginicus pertenece a la familia de los roncos (Haemulidae), una familia de peces conformada por 2 subfamilias en la que hay 19 géneros diferentes que agrupan a 133 especies distintas. El nombre del genero Anisotremus deriva del griego ‘anisos’ que significa ‘distinto’, y ‘trema’ que significa ‘orificio’, haciendo referencia a los dos orificios que presenta en la barbilla y que cumplen la función de órganos sensoriales. El epíteto especifico virginicus se le puso en referencia a la gran cantidad de ejemplares de esta especie que hay en las aguas de las Islas Virgenes. Se trata de una especie que vive en las aguas tropicales del océano Atlántico occidental, en los arrecifes de coral y fondos rocosos, desde aguas someras hasta los 50 metros de profundidad.

Fuente: FAO

El cuerpo de Anisotremus virginicus es alto (su altura es aproximadamente la mitad de su longitud), largo (longitud máxima de 40 cm) y comprimido lateralmente. Pueden alcanzar pesos de hasta 900 gr. Se caracteriza por la presencia de dos poros y una hendidura entre ellos, que se sitúan en la barbilla. Con estos órganos sensoriales, este pez es capaz de detectar el movimiento de sus presas ocultas en la arena. Posee unos gruesos labios y una boca de reducido tamaño. El interior de la boca es completamente rojo (uno de los rasgo distintivos de los roncos) y esta está dotada de numerosos dientes cónicos de pequeño tamaño. Los preopérculos están finamente serrados. En cuanto a las aletas, la aleta dorsal cuenta con 12 espinas y 16-17 radios blandos, siendo la porción blanda de la aleta de forma convexa. La aleta anal posee 3 espinas y 9-11 radios blandos. Las pectorales cuentan con 17 radios, mientras que la aleta caudal es de forma escotada.

En cuanto a la coloración de Anisotremus virginicus, destaca una franja negra en posición diagonal desde la parte trasera de la boca, pasando por el ojo y hasta la nuca. Posee una segunda franja negra, situada esta tras la cabeza, y que surge antes de las aletas pectorales y a una altura inferior a la de la inserción de las aletas pectorales en el cuerpo. Tras esta segunda franja, el cuerpo presenta bandas horizontales de color azul-plateado alternadas con otras franjas de color amarillo brillante. Tanto la cabeza como las aletas son de color amarillo brillante. Los ejemplares juveniles no presentan las franjas negras de los adultos, sino que poseen dos lineas negras verticales sobre un fondo blanco y una mancha ocelar de color negro en el pedúnculo caudal, así como la cabeza teñida completamente de color amarillo brillante.

Durante el día es frecuente encontrar a los ejemplares de Anisotremus virginicus formando bancos, donde los ejemplares descansan prácticamente inamovibles junto a entradas de cuevas. Una característica de la familia, y por lo tanto de esta especie, es que son capaces de emitir sonidos rechinando los dientes que posee en la faringe, y amplificando el sonido generado gracias a la vejiga natatoria. Por la noche, momento en el que esta especie es mas activa, explora de forma solitaria los fondos gracias a sus sensores, en búsqueda de sus presas, entre las que encontramos a moluscos, moluscos, equinodermos, anélidos y crustáceos. Sus fuertes mandíbulas rompen con facilidad las conchas y corazas de estas presas. Los ejemplares juveniles pueden alimentarse de ectoparasitos de otros peces mas grandes, y por lo tanto hacer una función de peces limpiadores.

La reproducción de Anisotremus virginicus ocurre en mar abierto, donde tras una fecundación externa, los huevos son abandonados a merced de las corrientes para diseminarlos.


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