Parablennius tentacularis, conocido comúnmente como ‘blénido cornudo‘ es un pez marino perteneciente a la familia Blenniidae y al orden Blenniiformes. El nombre del género ‘Parablennius‘ se deriva del griego, donde ‘para‘ significa ‘cercano‘ y ‘blennios‘ se refiere a un pez de moco o baba, haciendo alusión a la secreción mucosa que cubre su piel. El epíteto ‘tentacularis‘ proviene del latín ‘tentaculum‘, que significa ‘tentáculo‘, en referencia a las largas protuberancias o tentáculos que presenta sobre sus ojos. Parablennius tentacularis se encuentra distribuido en el Atlántico nororiental, desde las costas del sur de Inglaterra hasta Marruecos, y también es común en el mar Mediterráneo y el mar Negro. Este pez habita en aguas costeras, preferentemente en zonas rocosas, arrecifes y praderas de algas, generalmente a profundidades de entre 1 y 20 metros.
Parablennius tentacularis es un pez de pequeño tamaño, que mide entre 10 y 13 centímetros de longitud. Su cuerpo es alargado y comprimido lateralmente, con una cabeza grande y robusta, característica de los blénidos. Su rasgo más distintivo son las largas y finas prolongaciones tentaculares que posee sobre los ojos, que pueden variar en longitud y forma entre individuos. Su coloración es variable, desde tonos marrones, verdes, y grises, con manchas y bandas irregulares más oscuras que le permiten camuflarse eficazmente en su entorno rocoso o entre las algas. Presenta una aleta dorsal única, con radios espinosos anteriores más cortos que los blandos posteriores, lo que le proporciona una forma distintiva de ‘vela‘. A diferencia de otras especies similares, como Parablennius gattorugine, Parablennius tentacularis se distingue por tener tentáculos más largos y finos sobre los ojos, y una menor longitud total del cuerpo.
En cuanto a su alimentación, Parablennius tentacularis es omnívoro, con una dieta que consiste principalmente en pequeños invertebrados bentónicos como crustáceos, moluscos y gusanos, así como de algas. Utiliza su boca pequeña, equipada con dientes cortos y afilados, para raspar las algas de las rocas y capturar presas de pequeño tamaño. Este tipo de alimentación le permite adaptarse a diversos entornos y contribuye a su papel ecológico en el control de las poblaciones de invertebrados y en la limpieza de algas.
La reproducción de Parablennius tentacularis ocurre generalmente en primavera y verano. Esta especie es ovípara, y los machos se vuelven altamente territoriales durante la época de reproducción, defendiendo agresivamente pequeños refugios en grietas o bajo rocas donde las hembras depositan sus huevos. Después de la puesta, el macho fertiliza los huevos y se encarga de protegerlos hasta que eclosionan, ventilándolos con sus aletas para mantener un flujo constante de agua oxigenada. Los huevos son pequeños y adherentes, y una vez eclosionan, las larvas son pelágicas y pasan algún tiempo en la columna de agua antes de asentarse en el fondo marino.
Una curiosidad sobre Parablennius tentacularis es su capacidad para cambiar de color dependiendo de su entorno y estado emocional, lo que le proporciona una ventaja tanto para camuflarse frente a depredadores como para comunicarse con otros individuos, especialmente durante la reproducción. Su comportamiento curioso y a menudo audaz lo hace un atractivo sujeto de estudio para los biólogos marinos y un punto de interés para los buceadores que exploran las zonas rocosas del Mediterráneo y el Atlántico.
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