Parablennius gattorugine

Parablennius gattorugine, conocido comúnmente como ‘Cabruza‘ o ‘Rabosa‘, es un pez marino de la familia Blenniidae y pertenece al orden Blenniiformes. El nombre del género ‘Parablennius‘ proviene del griego ‘para‘ (cercano) y ‘blennios‘ (moco o baba), en referencia a la secreción mucosa de su piel, mientras que ‘gattorugine‘ deriva del italiano y significa ‘gato arrugado’, aludiendo a las arrugas y protuberancias que presenta en la cabeza, que le otorgan una apariencia similar a la de un gato fruncido. Esta especie se distribuye en el Atlántico nororiental, desde Noruega hasta Marruecos, así como en el Mediterráneo y el Mar Negro. Suele habitar en aguas costeras, especialmente en zonas rocosas y de arrecifes, entre los 2 y 30 metros de profundidad, aunque puede encontrarse hasta los 50 metros.

Parablennius gattorugine puede alcanzar una longitud de hasta 30 centímetros, aunque generalmente mide entre 20 y 25 centímetros. Tiene un cuerpo alargado y comprimido lateralmente, con una cabeza grande y robusta, provista de numerosas arrugas y protuberancias, especialmente prominentes en los machos, y una cresta carnosa entre los ojos. Sus ojos son bicolores, con la parte superior marrón y la inferior blanca, y sobre cada uno de ellos presenta un tentáculo ramificado. Su coloración es variable, desde tonos marrones, verdes y rojizos hasta grises, con manchas y bandas oscuras que le permiten camuflarse con el entorno rocoso. Además, está marcado con al menos siete barras oscuras que se extienden desde la aleta dorsal hasta el vientre. Los machos, particularmente durante la temporada de reproducción, pueden mostrar colores más intensos y vivos. Se diferencia de especies similares, como Parablennius pilicornis, por su mayor tamaño, la forma más pronunciada de su cabeza y las características crestas sobre los ojos.

En términos de alimentación, Parablennius gattorugine es omnívoro, pero su dieta está basada principalmente en organismos bentónicos. Se alimenta de pequeños invertebrados como crustáceos, moluscos, gusanos poliquetos y también de algas. Utiliza su boca pequeña pero fuerte para raspar algas y pequeños organismos adheridos a las rocas. Este comportamiento alimenticio contribuye al control de la población de pequeños invertebrados y al equilibrio del ecosistema de las zonas rocosas.

La reproducción de Parablennius gattorugine ocurre generalmente en primavera y verano. Durante esta época, los machos establecen territorios y atraen a las hembras mediante exhibiciones visuales y comportamientos de cortejo. La especie presenta fertilización externa: las hembras ponen huevos adheridos a rocas o grietas en el territorio del macho, que luego son fertilizados por este. Los machos protegen y cuidan los huevos hasta que eclosionan, mostrando un comportamiento territorial y agresivo frente a posibles depredadores o intrusos. Los huevos son pequeños, pegajosos y de color amarillo anaranjado, y una vez eclosionan, las larvas son pelágicas durante un tiempo antes de asentarse en el fondo marino.

Un dato curioso sobre Parablennius gattorugine es su comportamiento altamente territorial y agresivo, especialmente en los machos durante la temporada de reproducción. Son conocidos por defender vigorosamente su territorio, atacando a otros peces o incluso a buceadores que se acerquen demasiado. Esta especie, debido a su carácter y su peculiar apariencia, es de gran interés para biólogos marinos y aficionados al buceo.


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